Ha llegado el momento, el momento en que es necesaria mas fe que fuerza, el momento de exponer mi resistencia a prueba.
Si hay algo que me ha mantenido en pie, mientras recibía los golpes que no esperaba, ha sido mi resistencia, fuerte en el aspecto de no dejarme caer para no debilitar mis esperanzas de futuro, pero débil por mi lucha solitaria.
Me he dado tiempo para muchas cosas, ha fallado mi percepción cronológica sobre el tiempo lógico, prevaleciendo en la realidad este ultimo, y es lo que me ha venido ocupando últimamente.
El realismo se me hace presente, cuando miro a mi costado y no encuentro a nadie, cuando miro mis manos vacías de lo que construí, cuando, a pesar de seguir adelante, me encuentro vacío y solo. "Vacía mi esperanza, de la tuya quebrada, vacías mis manos, de las tuyas que tomaron, vacíos mis pasos, de los tuyos, que se marcharon, vacíos mis ojos, de tu luz apagada" - Apuntes de un enamorado - Gonzalo F. A. Fernandez
Todos mis pasos, aun los que he dejado de dar, tienen en ellos una intención y un sentido, sin medir otros pasos que haya podido dar, aun me mantengo en el mismo camino, por lo que es necesario continuar.
Y cuando estoy a punto de caer, solo recuerdo, vuelvo a levantar la mirada al frente y solo recuerdo... todavía me quedan sueños.
