A dos años de tu llegada en tiempos en que el covid encomendaba una ruptura,
La vida misma hizo una pausa, empujándonos a una limitada aventura,
Fuimos tres en una lucha de dos… tu madre, tu hermana y yo…
Los miedos lógicos, la incertidumbre reinante, alumbraban tu destello.
Transitamos días duros en la proximidad de tu llegada,
Un sanatorio y el acecho de la prematurez hacían eco cada día,
Y alojados en la esperanza, el paso a paso se desenvolvía,
Hasta el viernes 13 bien temprano en que tu vida alumbraba.
Hoy ha quedado atrás el bebe, se ha ido muy rápido,
Vienes formando palabras, haciéndote entender en un claro caminar,
Tienes carácter, astucia y ya no queda rincón de la casa por conquistar,
Traes la inocencia que interpela, llenando los días de amor límpido.
Eres la tesis que reescribiré tantas veces,
El fans inseparable de tu hermana y a su vez, su némesis,
El encanto del día en un gesto, los pasos que apuran las voces,
La vida misma, cual desafío por editar, un paréntesis.
Eres luz, eres esperanza, eres Feliz, la sonrisa picara, el correr desbocado
Los gritos que nos recuerdan vivos, un llamado de atención constante,
El andar sin miedos donde todo es un juego, el punto y seguido resonante,
Mi paz y mi guerra de amor en un tiempo que no me ha desamparado.
Eres hoy parte de un todo... Felices 2 años Nadia!
[Para otro atrasado 13/11]
